Arte

La sensación de que no exista un final, de sentirte parte de la inmensidad, es incomparable, tu imaginación no tiene limites, crea y expande.

Cambios

La dama del otoño, espera triste al invierno, porque atrás al verano dejo y a su amiga primavera nunca conoció. Ella trae la transformación, deslumbra al árbol con su color, pero el invierno sin hojas los dejo.
Les quito sus hojas porque un ciclo termino, y ahora aguarda que la primavera los acune para darle vida en una nueva estación.
Y el verano se desnuda de colores para completar la transformación. Y yo me pregunto ¿que mejor forma de apreciar la creación?
No hay mejor forma para entender, que todo en esta vida tiene un cambio de estación. Ni lo bueno dura mucho, ni lo malo prevalece, todo llega a un nuevo punto, todo en esta vida es renovación.

La magia que tus ojos no ven

Pensé que era una broma, el campo se terminaba y frente a mi la entrada al bosque con un letrero en madera que decía: "Usted ha llegado a los limites de la realidad". Curiosa forma de dar la bienvenida, me adentre por un solo motivo, necesitaba llegar al otro lado, el pueblo me esperaba y no podía demorar mas, el bosque prohibido era el camino mas corto.
 Juro que nunca me había sentido tan insignificante al ver la inmensidad y las formas de esos arboles, y a diferencia del resto de bosques que había visitado, este no era silencioso y muerto, estaba lleno de vida. Es increíble como lugares que no son pisados por el hombre nos dan otra percepción, pero esta ves iba mas allá de lo que esperaba encontrar. Mi abuelo dijo -Si te pierdes o si por un motivo debes adentrarte al bosque, no cortes ninguna rama, ninguna hoja del bosque, respeta cada insecto, cada roca, cada cosa que en el habite y por sobre todas las cosas  mantén al miedo alejado de ti o nunca podrás salir.
 La claridad de la noche, con su luna y sus estrellas iluminaban mi camino, pero había algo mas allí, algunas plantas, algunos sectores parecían tener una especie de polvo de color, que iluminaban ciertas partes del bosque. Cuando el viento soplaba era porque los arboles tomaban impulso para respirar, estaban vivos no había duda, sus ramas inquietas, sus hojas chocaban y parecían hablar entre si. Era un simple viajero pero ¿por que en otros bosques la gente no puede verlo, y en este donde nadie entra yo si puedo?

Disfrutar

Que hermoso es tirarse sobre el pasto y respirar aire puro, ver las flores, sus colores con toda su belleza. Es sentir que el tiempo se para, se para el mundo para contemplar ese instante, es ser presente, es ser consciente. Ningún minuto vuelve, todo avanza y todo sientes.
En nuestro mundo tan importante como respirar, es saber disfrutar cada momento como si fuera único.

Poema

Luna de hoy…
Enigmática, blanca, apacible
sabia, así eres tú luna de hoy
Que me miras desde tu hogar…
El firmamento.

Luna de mi tristeza
Mira a lo lejos mi soledad
Mira estos momentos
en que me pierdo en la eternidad.

Luna de mis recuerdos
De tantas noches pasadas
De tantos amores perdidos
De tantas noches de olvido

Luna de mis romances
Testigo mudo de mis amores
Del encuentro de los amantes
Que pintan la vida de mil colores.

Luna de mis lágrimas
Luna de mis sonrisas
Que iluminaste mis noches
Añorando nuevos días

Luna eterna amiga
Luna aliada confidente
Luna de los desvelados
Luna de mucha gente

Luna siempre la misma
Luna siempre diferente
Con tu magia embrujas
Hasta al más indiferente

Lunas hay muchas
pero cada una eres tú
Eterna, romántica, Fiel
Esa que llevo tatuada
En el alma y en la piel.

Confía

"Extiende bien las alas y seguro llegarás,
solo es cuestión de seguir a tu corazón en todo lo que harás.
Planear y planear sin titubear y poco a poco
y sin miedo a tu vuelo final llegarás "

La tierra de la felicidad

Creo que tenia 9 años cuando escuche aquella historia, trataba de un lugar escondido llamado "la tierra de la felicidad." Un espacio verde, donde la paz reinaba y el silencio retumbaba entre las montañas, un lugar donde el odio y la ambición no existían. A medida que fui creciendo, me iba decidiendo cada ves mas a buscar dicho lugar, porque la realidad que me tocaba enfrentar no era la deseada.
Emprendí mi viaje a Los 18 años, mis amigos me tildaban de loco, de que no existía tal lugar, pero yo estaba convencido de que algo encontraría.
Pase 40 años de mi vida fuera de todo lo que me pudiera llegar a resultar familiar, atravesé la profundidad de los bosques, la soledad de los desiertos, la inmensidad de los mares, cruce por cielo, agua y tierra y conocí millares de personas y de historias, pero nada que se acercara a la tierra de la felicidad. Muchos quisieron que renuncie, muchos me animaban a seguir buscando, pero no podía abandonar , debía encontrar aquel lugar para vivir en paz.
 Me acostumbre a vivir como viajero y cuando parecía que nunca llegaría, se alzaba frente a mi el mas bello de las paisajes. Montañas empinadas, cascadas y ríos que desembocaban en extensos bosques, animales y plantas por doquier, creí sin duda que era ese el lugar. Recorrí rapidamente en busca de algún indicio mas allá de la belleza, que demostrara realmente que esa era la tierra de la felicidad. Pare exhausto frene en un lago y me encontré con la sorpresa de que un anciano pescaba en el. Notó mi presencia pero en ningún momento mostró interés por verme, parecía no interesarle  mi llegada. El estaba en el centro del lago, con su vote y su caña. Me acerque a la orilla y le pregunte casi gritando:
- ¿Tu vives aquí? - Pero pareció no escucharme, seguía atento a su caña.
- ¿Es acaso esta la tierra de la felicidad?- Cuando termine esa nueva pregunta, frenó su caña y la apoyó sobre el vote, tomo los remos y navego hacia mi dirección.
-¿Buscas la tierra de la felicidad?- Me pregunto con una voz aspera.
-¿La conoces?- Le pregunte.
-Viví mucho tiempo en su búsqueda hasta que la encontré, me tomo toda una vida encontrar lo que muchos mueren sin entender-
Quede perplejo, al fin un posible testigo. Impaciente volví a preguntar en busca de alguna especie de ayuda: -¿es aquí verdad?-
-No aquí no hay mas que silencio-
-¿Sabe donde queda, tiene algún mapa, algo que me guié hacia ella?-
Me pidió que lo siga, me mostró un sendero y me dijo que valla por el, que me llevaba directo a la tierra de la felicidad y que en el camino encontraría mas respuestas a preguntas que luego al llegar me haría.
Tarde 20 años en ir y 20 años en regresar. A medida que llegaba a destino los caminos me sonaban mas familiares, como una especie de sueño ya soñado o una predicción de mi futuro, pero para mi sorpresa no era una predicción ni indicios del destino, era mi hogar de nuevo al que había llegado, mi ciudad, mi gente y es que sin darme cuenta, obsesionado por mi viaje había vuelto por la misma dirección por la que fui.
 Mi desilusión era tremenda, llegue a odiar a ese anciano que me había hecho perder 20 años de mi vida en volver al hogar, pero para mas sorpresas aun, me encontré nuevamente con el en una plaza que solía visitar en busca de pastos verdes y un poco de paz.
-¡Oiga!, yo lo conozco- Dije molesto. -Usted me prometió llegar a la tierra de la felicidad y solo me ha enviado a mi hogar, ¿acaso ha jugado conmigo?-
Con la misma tranquilidad con la que me hablo hace 20 años, me respondió.
- De regreso a tu casa has pasado por ella, pero estabas tan cerrado en tu destino en la meta final, en tu objetivo, que se te olvido frenar y observar alrededor-
- Pero de regreso no encontré nada que me diera indicio de que así fuera-
-Te equivocas, muy a pesar de tu ambición por llegar a destino, durante 20 años de tu vida, experimentaste esa sensación de felicidad, te excitaba la idea de saber que había un lugar mejor y fuiste durante todo tu viaje de ida y de vuelta una persona feliz en busca de su objetivo. Cuando llegaste la felicidad se esfumo porque ya no tenias nada que buscar estabas en el lugar, y ese simple hecho de estar parado ante tanta inmensidad no representaba nada para ti, pero tu camino era la tierra de la felicidad no tu destino, la felicidad no esta fija en un lugar, nada es eterno, todo se transforma.-
Comprendí aquel entonces que mi vida cambiaría para el resto de mis días y que ya no vería las cosas con la misma ambición y el ahora y el andar, eran mas importante que buscar algo meramente material como un pedazo de tierra donde vivir en paz.

Tu interior

Cierra los ojos y escucha la voz que te habla, no preguntes de donde viene, no cuestiones, no interrogues, fluye y déjate llevar.
Cuando te sientas perdido y el "que dirán" de los demás nuble tus sentidos. Cierra los ojos y escucha esa voz, esa que solo tu puedes oir.

Desafió

Iremos en busca de una nueva aventura, cruzaremos las fronteras y atravesaremos cualquier obstáculo. No se hacia donde voy, no se cual sea el objetivo, pero leo las señales que la vida me va dando, converso con los espíritus del aire y trato de aprender todo lo que pueda de este nuevo camino. De tanto en tanto me enfrento a alguna sombra que creía ya extinta, pero me di cuenta que nunca mueren, solo las dejamos atrás en un lugar donde no nos pueden lastimar, en el olvido. Pero siempre están al acecho, esperando una caída para volver a atacar. En la vida de un guerrero la lucha es constante.

Inmensidad

"...Ya que este universo que conocemos
tan sólo es un grano de polvo en otro universo
todos los granos de polvo de este universo que conocemos
contienen diminutos universos sin medida,

sin fronteras dentro del átomo
sin fronteras en la inmensidad;

por enorme
por incomprensible
por aterrorizante que nos pueda parecer toda esa demostración,

todo eso es básicamente
tu propio ser interior.

Ese ser que no puedes tocar
ni ver
ni clavar con una aguja
ni controlar
porque está demasiado próximo

De la tierra y del hombre

Fue virgen, fue solemne, fue madre nuestra tierra
y en cada condición acrisoló sus montes,
sus ríos, sus cavernas de frutos silenciosos,
sus joyas de rocío que amamantan a la abeja,
sus prados cual mantel en el festín de la existencia.
Y el hombre, sólo el hombre, se coronó en su altura,
la poseyó de noche, acarició sus costas,
recogió con sus manos la pulpa de sus bosques,
el frío mineral, la verdura luminosa
y el sempiterno viento de playas y desiertos.
La abandonó, se dice, la dejó por ciudades
que en ebria fantasía no pudieron imitarla,
con torres de cristal heladas como peces
y como tal inmutables, tristes, silenciosas.
Se desprendió del pan sin ver la arquitectura
que del trigo enseñaba su paz al campesino,
se hizo doctor, gerente en las mareas,
obispo de las rosas, ministro en los ocasos
y se vendió, compró, llenó contratos con la luna,
le puso horario al sol y al cielo de las lluvias.
Su amor no resultó, no era la tierra
la novia taciturna, la mujer sin boca,
y una explosión se alzó, tifones, terremotos
y aludes en la selva aplastando al pobre hermano.
También contaminó la mesa en que comía,
dejó sin flor el bosque, defecó en las piedras
y no dejó a sus hijos más que el sueño de salvarla.
El hombre aquel murió, la tierra casi muere,
viuda, solitaria, estremecida en los dolores
de cataclismos para los que no tuvo jamás remedio
y atropellada entonces por el bastión de los sin alma.
Con ella quedan ya sólo rincones de agua pura,
gavillas de esperanza que el heredero ya conoce,
nos llama, nos llamamos a construir desde la ruina,
a dejar para los árboles un corazón menos reseco
y un mundo con fervor que reconoce sus errores.
La tierra no es del hombre, el hombre es de la tierra,
y nosotros cantaremos cuando regresen a su abrazo.