Bienvenidos

Es momento para volver a hablar con las piedras, plantas, animales; de reencontrar la vinculación sagrada con las montañas, los ríos, las cascadas, los valles; para recuperar la conexión con el espíritu del agua, del fuego, del viento, de la tierra; para reencontrarse con los procesos de acrecentamiento de la conciencia y adentrarse a otras realidades invisibles, para desempolvar de la mente todo la ciencia y tecnología material y sutil desarrolladas por los abuelos, para vivenciar el reencuentro telúrico con todos los seres, para reiniciarse en los procesos de fusión cósmica....
Es momento de hacer rituales que den significado a los actos. Es momento de lo sagrado que no es otra cosa que el significado mismo que le otorgamos a las cosas que valoramos.

Translate

viernes, 15 de junio de 2012

El guerrero

Fui la voz de aquellos que murieron en este mundo por un lugar mejor, fui quien por su pueblo lo dio todo, su alma, su espada y su vida. Fui el oprimido, el que si no luchaba era condenado a caminar en la oscuridad y a dormir en el abismo.
 Ahora mi cuerpo descansa y mi alma camina a través del tiempo. Ahora soy el que mira, el que escucha antes de actuar, ahora soy la voz dormida que nadie quiere oír. Porque el honor y la lealtad se fueron con mi carne y de esta realidad solo quedan huesos, los restos de mi pasado, de una espada que se tiño de sangre en busca de su camino.
 Y conmigo miles mas cayeron, por la ironía de un rey que nos enseño a ser ricos, ricos en oro y poder. Hoy le rió a la muerte y sepa usted entender, que mi época era muy dura, solo tenia la fe. Debía servir para sobrevivir, para no ser campesino y ser un infeliz. Ahora entiendo porque aquel hombre, quería sembrar la tierra y no adentrarse en la guerra. No era por miedo como yo creí, el era realmente libre, una persona feliz. Yo me batía en peleas, convencido que era mi destino, el de un hombre que debía servir a su rey, y nos llenamos la cabeza con palabras, aferrados a ideas como si fuera una ley. Desprecie a los grandes ancestros por ser viejos y nada tener, y ahora después de muerto los empiezo a comprender. Me decían que un guerrero no lo era por adentrarse en una guerra, sino por enfrentar a sus miedos, a esos de los cuales uno se aferra. ¿Como podía entenderlos? si yo defendí a mi pueblo del ataque de un rey que se creía mi dueño. Aun así todos ellos terminaron desapareciendo, solo así pude comprenderlo. Decían que la guerra solo traería mas guerra y que los valores que hacen la grandeza del hombre no se conseguían matando a otro hombre. La paz se consigue haciendo el amor, en todos sus aspectos aunque invadan odio y dolor.
 Y ahora que ya no soy carne, quiero que aprendas a valorarte, por lo que eres y no por lo que dicen que debes ser. La verdadera enseñanza no es cuando aprendes a caminar, sino cuando aprendes que hay mas de una forma de ver la realidad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario